2/7/09

Amanezco


Hoy es un día triste. Se han juntado muchas cosas que no tenían porque ocurrir, pero así son las cosas. Aún hoy asocio mi tristeza a la de aquel día. Dentro de dos meses hará un año que mi padre ya no está conmigo.
La enfermedad se presentaba caprichosa y a pesar de la resistencia, eso era lo que debía suceder.
Aún no comprendo cómo mi mente pudo asumir que aquello iba a ocurrir tarde o temprano. Fue un año muy largo y aún me corroe la culpa porque cuando recibí la noticia, a pesar del dolor, pensé que aquello era lo mejor y lo más justo para todos.
Aún cierro los ojos y puedo recordar como si hubiera sido ayer la imagen de ese cuerpo inerte. Aquel no eras tú y aunque trato de olvidarlo, aún recuerdo el dolor en mi pecho y el llanto desconsolado.
Hoy he despertado igual. Me pregunto cómo se sobrelleva un día como este. Duele sentirse vacía. Duele levantarse sabiendo que no puedo verte.

1 comentario:

  1. Hola Thayra!
    Entiendo tu dolor, yo también he pasado por la terrible situación de perder a un ser querido, y en cierto punto es inconcebible, todos los días empezamos a vivirlos como si todavía estuvieran a nuestro lado sólo para caer en la cuenta de que ya se fueron. No sientas culpa, porque creo que siempre es mejor que la vida se termine a tener que vivirla constantemente en el sufrimiento y el dolor que traen aparejadas las enfermedades. A mí siempre me sirvió hacer un recuento de los días felices que viví con esa persona -en mi caso mi abuelito- en los momentos en los que extraño o me siento triste...y simplemente sonrío, porque sé que es lo que él hubiera querido. Los días así se sobrellevan acudiendo a ese espacio en el corazón en el que guardamos a los seres queridos que ya no están pero que nos acompañan día a día con su esencia...
    Espero que te sientas mejor.
    Muchas gracias por visitar mi blog.
    Un abrazo!

    ResponderEliminar